Customer Story 21 dic. 2021 4 min. de lectura

Máquina de rayos X de ZEISS: el as para ganar nuevos clientes

MRB Guss garantiza la calidad con ZEISS BOSELLO MAX de 450 kV

Desde diciembre de 2020, MRB Guss GmbH, en Herzogenburg, cerca de Viena, asegura la calidad de sus fundiciones con la máquina ZEISS BOSELLO MAX de 450 kV. Es una inversión que se está amortizando. Con este dispositivo, la empresa puede garantizar la calidad de las fundiciones no solo con mayor rapidez, sino también de forma más exhaustiva. Estas ventajas permiten a la empresa producir con más eficiencia y atraer a nuevos clientes.

Un fundidor lo es para siempre. Eso es lo que dice el folleto de la empresa MRB Guss. La fascinación por la fundición no solo la comparten los dos directores ejecutivos de MRB Guss, Markus Rosenthal y Ralf Bachus, sino también Michael Gundacker, el director de Gestión de Calidad. En su opinión, mantener el proceso de fusión y fundición lo suficientemente estable como para que el material y las piezas se fabriquen con la calidad necesaria y a un coste competitivo, es todo un arte. Además, la empresa es consciente de su responsabilidad para con el medioambiente y quiere aumentar la eficiencia energética de sus fundiciones.

Para una vista del interior no destructiva

Según Gundacker, este objetivo no se puede conseguir sin una garantía de calidad sostenible. Además de analizar la arena (a partir de la cual se forman las piezas) y la masa fundida, naturalmente también se inspeccionan minuciosamente las fundiciones. En esta industria es habitual cortar y analizar piezas de muestra. El lugar donde se realiza el corte lo determina un programa de simulación que muestra la probabilidad de porosidades, burbujas o inclusiones.

"Sin embargo, este método no puede afirmar con seguridad si hay defectos en otras zonas de la pieza", explica el jefe de Calidad. En el peor de los casos, los errores pueden detectarse durante el procesamiento y, en ocasiones, después de que la pieza ya esté en manos del cliente. Esto no solo supone un coste y un problema medioambiental, sino que también afecta a la imagen de la empresa.
Para evitarlo, la empresa de Herzogenburg utiliza un dispositivo de rayos X desde diciembre de 2020. "Es un gran avance para nosotros, también para la captación de clientes", explica Gundacker. Es su as bajo la manga, por así decirlo. El as que le ayudará a ganar la partida.

Michael Gundacker, director de Gestión de Calidad, MRB Guss GmbH

Los datos nos pueden ayudar a evitar errores incluso antes de que se produzcan.

Un dispositivo, muchas ventajas

La máquina de rayos X ZEISS BOSELLO MAX de 450 kV se utiliza especialmente para comprobar la muestra maestra inicial e inspeccionar muestras aleatorias. Solo un cliente, del sector de la aviación, desea utilizar la máquina de rayos X con todas las piezas.

Y aunque la máquina todavía es bastante nueva, sus ventajas ya se han hecho patentes. Por ejemplo, se ha reducido el tiempo de inicio de la producción en serie. Esta es una buena noticia no solo para los clientes, que reciben sus piezas con más rapidez. También hace que la producción sea más rentable.

Y como los resultados de rayos X permiten una comparación detallada entre la pieza objetivo y la real mediante simulación, la calidad de las piezas se mejora constantemente. Los datos de los rayos X ofrecen inmediatamente un valor añadido para el diseño de modelos CAD o para la obtención de modelos CAD que satisfagan los requisitos técnicos de la fundición. "Los datos nos pueden ayudar a evitar errores incluso antes de que se produzcan".

Pero la ventaja más obvia, según Gundacker, es que ahora la empresa puede reaccionar con más rapidez gracias a que puede realizar una inspección no destructiva y exhaustiva. Si se detectan defectos en los lugares relevantes, el personal puede desechar de inmediato las piezas en cuestión. Como las piezas defectuosas ya no se procesan, la empresa actúa de forma más rentable y sostenible.

Un duro proceso de selección

Aunque MRB Guss ya utiliza dispositivos de medición de ZEISS y está extremadamente satisfecha con el soporte que recibe, la decisión de adquirir un dispositivo de rayos X que cuesta varios cientos de miles de euros, no fue fácil.

MRB Guss pidió presupuesto a varios fabricantes. Cada empresa recibió los componentes típicos y redactó un informe de viabilidad. Esto sirvió para separar el trigo de la paja. No todos los fabricantes pudieron demostrar una alta resolución para las fundiciones, por ejemplo para un colector de escape de 600 mm.

Además del rendimiento y el soporte, otro factor jugó a favor de ZEISS: el tamaño de su máquina. Con un peso de 14-16 toneladas, la máquina de ZEISS pesa la mitad que otras máquinas de rayos X con el mismo rendimiento. El diseño explica por qué el dispositivo de ZEISS puede ser tan compacto a la vez que proporciona al operador la protección necesaria contra la radiación.

Aunque un dispositivo de menor rendimiento habría sido suficiente para radiografiar la mayoría de las fundiciones de la cartera de productos actual de MRB Guss, la dirección optó por la máquina de 450 kV. Como resultado, el dispositivo puede radiografiar metal de hasta 50 mm. Por tanto, Gundacker está convencido de que adquirir el dispositivo de ZEISS fue "una decisión pensada para el futuro que ya está dando sus frutos en MRB Guss".

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